El CLT tiene una mayor relación de resistencia a peso que el acero y el hormigón. Ofrece una mejor respuesta en su comportamiento estructural, gracias a una mayor continuidad en la transmisión de cargas.

Los paneles contra laminados – CLT – se fabrican con una tecnología de fabricación digital extremadamente precisa y flexible.

Al ser un material ecológico, fabricado con madera cultivada de forma sostenible, proporciona importantes beneficios medioambientales que hacen de este producto sea superior al acero y al hormigón.

Muchas partes de la vivienda como los muros, los entrepisos y los techos pueden ser prefabricados con la madera CLT y posteriormente ser ensamblados en el sitio de la obra. Evitando de esta manera los desperdicios y el gasto innecesario de energía, mientras que minimiza la necesidad de mano de obra.

Además de sus interesantes propiedades mecánicas, el cruce de los pliegues asegura una gran estabilidad dimensional, permitiendo una gran libertad arquitectónica. Los acabados visuales en madera expuesta confieren a muchos proyectos unifamiliares una belleza única.  

Los paneles de CLT utilizados en los muros pueden ser personalizados y adaptados, es decir, que se pueden considerar todas las aberturas (ventanas y puertas) antes del ensamblaje de la estructura. Las máquinas que se utilizan para producir los paneles de CLT permiten este nivel de previsión para nuestras edificaciones.

Las uniones entre los elementos de CLT, con otros elementos de madera como pilares o vigas de madera laminada, y su unión con otros soportes, como hormigón y metal deben estar especialmente estudiadas para ofrecer la máxima seguridad estructural.

A nivel constructivo, en el cálculo estructural, su bajo peso, nos permite reducir la cimentación – normalmente de hormigón armado- y por la misma razón, los movimientos de tierra. Además, posibilita una cimentación ligera, usando pequeños «pilotis» y evitando así el uso de hormigón.

A nivel de confort térmico, la madera nos ofrece cierto aislamiento y no produce puentes térmicos, mejorando así la estanqueidad interior. Para mejorar la inercia térmica, característica que la madera no posee, se puede trabajar con diferentes materiales de revestimiento pétreos.

La madera es un material que presenta una buena absorción de las ondas acústicas, lo que se traduce en una reducción de la reverberación de las ondas sonoras y en una mejora del confort acústico interno de las viviendas.

Los sistemas constructivos con paneles estructurales CLT son muy flexibles y permiten insertar sin dificultad puertas y ventanas, incluso durante y después de que la obra haya finalizado.

El CLT es un material altamente adaptable, es decir, que se puede moldear para darle diferentes formas que permiten una mayor diversidad arquitectónica. Los paneles incluso se pueden curvar durante su fabricación dependiendo de los requerimientos del diseño del edificio.

Para el proceso constructivo con CLT es muy importante tener en cuenta que debe de existir una excelente planificación previa y una estrategia de ejecución muy clara y definida, ya que se ejecuta en seco y con piezas previamente diseñadas y fabricadas en taller.

La posibilidad de calcular exactamente la cantidad requerida de CLT para una estructura y la capacidad de planificar desde el inicio todo el proceso también reduce el coste total.

El CLT puede ser más resistente al fuego que algunos aceros no tratados. Cuando se somete al fuego, su capa exterior se convierte en carbón aislante que puede mantener el fuego a raya durante 30-120 minutos.